Los nuevos migrantes se verán obligados a esperar cuatro años antes de acceder a la mayoría de los pagos de asistencia social del gobierno en virtud de una importante medida de reducción de costos incluida en el presupuesto federal del 2021.
Puntos destacados:
- Cualquier persona que obtenga la residencia permanente a partir del 1 de enero 2022, tendrá que esperar cinco años para poder acceder a ayudas del gobierno.
- Economistas pedían que la espera se redujera a seis meses para brindar a los migrantes calificados una mejor oportunidad de encontrar empleo.
- El gobierno mantiene el límite de migración en 160,000 plazas a pesar de un segundo año previsto de migración neta negativa desde el extranjero.
El gobierno ahorrará 671 millones de dólares durante cinco años al aplicar el Periodo de espera de cuatro años para residentes recién llegados (Newly Arrived Resident’s Waiting Period) aplicable a cualquier persona a la que se le otorgue la residencia permanente en Australia a partir del 1 de enero del próximo año.
La duración del período de espera para recibir pagos de asistencia social dependía anteriormente de la situación del migrante y el tipo de visa, pero la nueva medida alinea la mayoría de los subsidios gubernamentales y las clases de visa con la espera actual de cuatro años para acceder a JobSeeker, Austudy y pagos de asignación para jóvenes.
El gobierno ahorrará con esta medida $45 millones en 2022-23, y los ahorros aumentarán a $196 millones y $436 millones en 2023-24 y 2024-25 respectivamente.
Antes de los cambios, que se revelaron el martes por la noche como parte del tercer presupuesto federal del tesorero Josh Frydenberg, los migrantes permanentes podían acceder de inmediato al Beneficio Fiscal Familiar B y algunas clases de visa estaban exentas de los períodos de espera.
Cuanto más trates a los migrantes como no australianos, peor será para que consigan buenos logros.
Anteriormente, varios pagos también tenían tiempos de espera de dos años más cortos para los migrantes, incluido el pago del cuidador, el pago del padre y la pareja, el pago por licencia parental y el beneficio fiscal familiar A.
No está claro si los cambios afectarán a los titulares de visas humanitarias.
“Aún tenemos que ver cuáles son los detalles, a quiénes se aplican y a qué pagos, pero no sienta un buen precedente para una buena política pública”, dijo a SBS News Gabriela D'Souza, economista principal del Comité para el Desarrollo Económico.
"A mí me parece un robo descarado de dinero a personas que no pueden trabajar".
En un , el Comité de Desarrollo Económico de Australia (CEDA por sus siglas en inglés) recomendó que el período de espera para residentes recién llegados se redujera de cuatro años a seis meses para brindar a los migrantes calificados una mejor oportunidad de encontrar empleo.
“Cuanto más trates a los migrantes como no australianos, peor será para que consigan buenos logros. No creo que debamos establecer estas distinciones entre inmigrantes y australianos”, dijo la Sra. D’Souza el martes por la noche.
La directora ejecutiva del Consejo Australiano de Servicios Sociales, Cassandra Goldie, también ha dicho que está "profundamente preocupada" por los recortes.
Como parte del presupuesto del martes, el gobierno reveló su programa de migración para el próximo año financiero, manteniendo el límite en 160,000 plazas a pesar de un segundo año previsto de migración neta negativa del extranjero.
También reiteraron sus planes de centrarse en las solicitudes de visa desde Australia, sin cambios en la cantidad de plazas disponibles en las visas familiares, de capacitación o humanitarias.
Frydenberg también reveló la suposición del gobierno de que la migración permanente y temporal comenzaría a reiniciarse gradualmente a mediados de 2022.
