En una última comparecencia antes de presentar su cuarto presupuesto esta noche, el tesorero federal Josh Frydenberg dice que se han introducido cambios para aliviar temporalmente los costes de vida y proporcionar planes a largo plazo para la economía.
Se espera que el presupuesto de 2022/23 muestre que la tasa de desempleo se reduzca al 3,75 por ciento en el trimestre de septiembre de este año, su nivel más bajo desde 1974.
También se espera que incluya pagos únicos de 250 dólares para los australianos con bajos ingresos.
El líder de la oposición, Anthony Albanese, afirma que, aunque los laboristas no impedirán los pagos de apoyo puntuales, el momento es sospechoso a la luz de las elecciones que se avecinan.
El Primer Ministro, Scott Morrison, empezó a presentar su propuesta de presupuesto en el aeropuerto del occidente de Sídney, en construcción.
Con motivo del inicio de la construcción de la pista internacional del tan esperado segundo gran aeropuerto de Sídney, el primer ministro destacó el compromiso del gobierno con las infraestructuras en lo que será un campo de batalla clave en las próximas elecciones federales.
La apertura del aeropuerto internacional Nancy Bird Walton está prevista para 2026.
Pero Morrison tiene los ojos puestos en un dividendo político más inmediato.
Y eso significa que el oeste de Sídney no está solo.
El Gobierno ha prometido casi 18.000 millones de dólares para proyectos en todos los estados y territorios.
Esto se suma a los más de 110.000 millones de dólares prometidos anteriormente para la financiación de infraestructuras.
No sólo el gasto en infraestructuras es lo que el Gobierno quiere promover.
Morrison también anunció que el Gobierno va a ampliar su programa de garantía de viviendas, que permite a los compradores que reúnan los requisitos necesarios adquirir una propiedad con un depósito de sólo el 5%, en lugar del 10% habitual.
Pero tal vez el mayor tema de conversación de las últimas semanas haya sido la subida de los precios de la gasolina, que está contribuyendo fuertemente a las presiones sobre el coste de la vida.
Se espera que el gobierno reduzca temporalmente el impuesto sobre el combustible - actualmente fijado en 44,2 céntimos por litro - en el presupuesto para tratar de aliviar esa presión.
Morrison afirma que este presupuesto pretende abordar todas las presiones del coste de la vida a las que se enfrentan las familias australianas.
El líder de la oposición Anthony Albanese, dice que lo que está ocurriendo ahora es un síntoma de problemas a más largo plazo.
Con unas elecciones federales que deben celebrarse a más tardar el 21 de mayo, lo que está en juego en este presupuesto para ambas partes no podría ser mayor.
Entrevistado: Charlie Rios, economista en Sydney.
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