El presidente peruano, Pedro Castillo, vive su peor momento al cumplir un año en el cargo. Está sumido en su peor crisis por graves acusaciones de corrupción que involucran a su propia familia y allegados.
Además, las investigaciones contemplan un presunto tráfico de influencias en la compra de combustible por la estatal Petroperú en 2021 y la supuesta obstrucción a la justicia en la destitución de un ministro del Interior. También un presunto tráfico de influencias en un expediente de ascensos militares; supuesta corrupción y colusión agravada en un proyecto de obra pública y por el plagio en su tesis universitaria.
El presidente Castillo brindó un balance de lo que ha sido su primer año de gestión ante un Congreso que busca decididamente destituirlo. Además, culpó a la prensa de no destacar sus logros.
Según el diario ‘El Comercio’, el mandatario y su entorno han protagonizado, durante su administración, 237 situaciones polémicas. Es decir, cada 36 horas en promedio el Ejecutivo peruano fue centro de un nuevo cuestionamiento.
El gabinete peruano está conformado por 19 ministros. En el año de mandato de Pedro Castillo hubo más de 50 caras diferentes en estos cargos. Una inconstancia que le ha valido parte de su credibilidad.
La última semana, Castillo cambió por séptima vez al ministro del Interior después de que el anterior creó un equipo especial de la Policía para apoyar a la fiscalía en los casos abiertos contra el mandatario y otros altos funcionarios.
En el mensaje a la Nación, algunos congresistas dieron la espalda al presidente, otros se retiraron durante su mensaje y al final fue interrumpido por gritos de Congresistas exigiendo su renuncia.
En medio de este clima, han quedado de lado las promesas de cambio a favor de los sectores peruanos más vulnerables con los que el maestro rural llegó al Palacio de Gobierno. Mientras los peruanos están divididos sobre el mandato de Pedro Castillo.
Los opositores de Castillo han debatido entre noviembre y marzo dos mociones para sacar del puesto al presidente, mediante la figura de la “vacancia por incapacidad moral permanente”, pero no lograron los 87 votos requeridos.
Acuerpado por un pequeño partido de corte marxista leninista, Pedro Castillo asumió el 28 de julio del año pasado tras ganar en segunda vuelta, con una diferencia de 44 mil votos, a la derechista Keiko Fujimori, investigada por lavado de activos y obstrucción a la justicia.
Indicó que en este primer año a cargo de Perú recibió “una bofetada en la mejilla”, pero aclaró que en los próximo 12 meses no piensa poner la otra, sino que buscará consensos. Escucha el reporte completo presionando sobre la imagen principal.
