La Oficina de Meteorología de Australia, (BoM, por sus siglas en inglés) ha declarado oficialmente un fenómeno de El Niño en el océano Pacífico, al este de Australia, y un dipolo positivo en el océano Índico, al oeste del país.
Mientras algunas zonas de Australia ya sufren un calor abrasador en septiembre y peligrosas condiciones de incendio, la oficina meteorológica ha declarado un doble impacto con estas dos condiciones, que aumenta el riesgo de que tengamos “más de lo mismo”.
El Niño es un fenómeno climático que influye mucho en el tiempo de Australia. Forma parte de un ciclo natural asociado a un periodo sostenido de calentamiento en el Pacífico tropical central y oriental y suele provocar condiciones más secas y temperaturas superiores a la media en gran parte del país, pero sobre todo en el este y se produce cuando las temperaturas de la superficie del mar en el Pacífico central y oriental se calientan considerablemente por encima de la media.
Esto provoca un cambio en la circulación atmosférica, alterando los patrones de viento que influyen en el tipo de clima que hace en Australia.
Pero las recientes recomendaciones del BOM sugieren que se está afianzando la perspectiva de otro factor de tiempo seco en Australia: un dipolo positivo del Océano Índico (Indian Ocean Dipole, IOD por sus siglas en inglés).
Max Henríquez Daza, meteorólogo de la Universidad de Ciencias Naturales de Budapest-Hungría y ex colaborador de la Organización Meteorológica Mundial (OMM) explica que el IOD es otro fenómeno que se presenta en el Océano Índico, ya que es una perturbación entre las costas del oeste de Australia y las costas del Oriente de Africa, y que podría sostenerse hasta el final de la primavera.
Según el meteorólogo, las condiciones del niño se han presentado desde hace 2 meses y es posible que permanezca hasta marzo del 2024.
Esta perspectiva preocupa a las autoridades, ya que el país está saliendo de tres años de condiciones húmedas e inundaciones, que han provocado un fuerte crecimiento de la vegetación.
Cuando toda esa vegetación se seque, Australia tendrá grandes posibilidades de enfrentar incendios forestales.
Ya se han producido grandes conflagraciones en el Territorio del Norte y una importante actividad incendiaria a principios de temporada en Queensland y Victoria.
El Dr. Simon Heemstra, Director de Riesgos Comunitarios del Servicio de Bomberos Rurales de Nueva Gales del Sur, que colabora estrechamente con la Oficina en la elaboración de sus previsiones para el verano, advierte que, quienes vivan en zonas propensas a los incendios, deben empezar a prepararse para condiciones más secas y cálidas.
Hemos tenido una serie de años bastante húmedos. Y es importante que la gente se dé cuenta de que estamos entrando en un verano en el que podríamos sufrir incendios importantes. El mensaje para la comunidad que vive en esas zonas es que entiendan que hay un potencial real de incendios forestales esta temporada. Es importante que tomen medidas para prepararse y, en particular, que se fijen en lo que pueden hacer en sus propiedades, como retirar los materiales inflamables y limpiar los canalones del jardín.Dr. Simon Heemstra, Director de Riesgos Comunitarios del Servicio de Bomberos Rurales de Nueva Gales del Sur.
Una ola de calor primaveral tiene a amplias zonas de Nueva Gales del Sur y el este de Victoria sofocadas bajo temperaturas máximas de 10 a 15 grados centígrados por encima de la media de septiembre.
Se prevé que el calor extremo se traslade al norte de Queensland, con lo que el peligro de incendio se extenderá a las zonas meridionales del estado y al vasto interior de Channel Country el jueves y el viernes.
Para escuchar el audio con la información ampliada y la entrevista a Max Henríquez, pulsa la flecha en el botón de reproducción que aparece al inicio de esta página.
