Nuevos centros de cuarentena son claves para reabrir las fronteras y luchar contra la COVID-19 en Australia

Los estados australianos de Nueva Gales del Sur y Queensland, en la costa este del país, quieren ue el gobierno federal de Scott Morrison, les ayude financieramente a sacar adelante sus proyectos para crear centros de cuarentena especializados para prevenir la entrada de la COVID-19 desde el exterior, tal y como lo hizo con Victoria.

Indians in Sydney Australia Prime Minister Scott Morrison

Repatriation flights into Howard Springs resumed on 15 May. Source: AAP Image/Glenn Campbell

Desde el inicio de la pandemia de COVID-19, más de 358.500 personas que regresaron del extranjero han sido alojados en los hoteles de cuarentena de Australia, período en el cual se han producido más de veinte filtraciones de este virus a la comunidad, entre ellos los que provocaron el confinamiento de cuatro meses en la ciudad de Melbourne el año pasado.

Los hoteles operan desde finales de marzo de 2020 según los acuerdos de los gobiernos estatales para permitir la entrada de ciudadanos y residentes a Australia tras el cierre de las fronteras internacionales, mientras que el gobierno de Morrison habilitó hace unos meses el centro de Howard Spring, en el Territorio Norte, para las cuarentenas de las personas repatriadas.

Con los nuevos brotes en Australia con variantes altamente contagiosas y los planes para la reapertura de las fronteras el próximo año y la entrada de inmigrantes y los estudiantes internacionales, los centros especiales de cuarentena son claves para contener a la COVID-19 y poner los hoteles a disposición de los turistas.


Puntos destacados:

  • El primer ministro Scott Morrison sostiene que el sistema de cuarentena del hotel es "99,99% efectivo" para proteger a la comunidad contra el COVID-19, pero cada vez más estados y territorios dicen que no es suficiente.
  • El gobierno de Morrison prometió la semana pasada 200 millones de dólares para ayudar a Victoria, afectada por el COVID, a construir un centro de cuarentena con 500 camas en las afueras de Melbourne.
  •  Con los nuevos brotes en Australia con variantes altamente contagiosas y los planes para la reapertura de las fronteras el próximo año y la entrada de inmigrantes y los estudiantes internacionales, los centros especiales de cuarentena son claves para contener a la COVID-19 y poner los hoteles a disposición de los turistas.

 

“Si el origen del COVID son los australianos que regresan del extranjero -y el virus se escapa de algún modo de nuestro sistema de cuarentena-, la respuesta es asegurarse de que nuestro sistema de cuarentena sea hermético. Deben seguirse los procedimientos sanitarios, pero lo que es más importante, deben establecerse instalaciones de cuarentena de alta tecnología construidas a tal efecto, que incorporen tecnologías que impidan o eliminen la propagación del virus y nos permitan acoger con seguridad a los australianos que regresan” dijo en un Jeff Connolly, CEO de Siemens Australia & Pacific. 

Por su lado,  la premier de Nueva Gales del Sur (NSW, siglas en inglés), Gladys Berejiklian, arremetió este lunes contra el gobierno federal, diciendo que tiene que asumir la responsabilidad cuando se le pregunta sobre una defensa clave contra la COVID-19.
Berejiklian a Morrison, quien es de su mismo partido, que si el gobierno federal quiere aumentar la capacidad de la cuarentena de viajeros internacionales va a tener que "hacerlo él mismo", según una entrevista con la emisora 2GB.

El estado acogía a miles de australianos cada semana y había entre 5.000 y 5.500 personas en cuarentena en hoteles de Nueva Gales del Sur en un momento dado, explicó la Primera Ministra.

Un número mayor "no es bueno", declaró Berejiklian, citando los consejos de la policía y de los funcionarios sanitarios, según cito el portal news.com.au.

Berejiklian advirtió que, una vez que se abran las fronteras internacionales, esos hoteles ya no podrán utilizarse como centros de cuarentena, lo que supondrá un enorme reto para el gobierno.

"En el futuro no se podrá tener un hotel construido para el turismo como instalación de cuarentena", dijo la premier, que considera que habría que construir otras 10 nuevas instalaciones de cuarentena para igualar lo que ya está haciendo su gobierno en Nueva Gales del Sur.

Pedido de los estados más poblados de Australia

El reciente brote en Melbourne, que provocó el confinamiento de Melbourne por dos semanas, reavivó el debate en torno a la necesidad de construir centros especiales para las cuarentenas, y en los últimos días el gobierno del estado de Victoria obtuvo el apoyo financiero de 200 millones de dólares del gobierno federal para la construcción de instalaciones especiales con 500 camas dedicadas a estos fines.

Al parecer, el gobierno federal se inclina por Avalon como ubicación ideal para el centro, ya que el lugar preferido por el gobierno de Victoria, Mickleham, ya cuenta con un centro de cuarentena para animales.
Tras el anuncio de esta ayuda, los gobiernos del estado de Queensland y Nueva Gales del Sur también quieren la ayuda del gobierno estatal.

El sábado, la premier de Queensland, Annastacia Palaszczuk, expresó en la conferencia estatal del Partido Laborista de Queensland que tiene un plan para construir un centro de 1.000 camas cerca de Toowoomba “para proporcionar la seguridad y la certeza que nuestro país necesita", pero se cree que esta propuesta no cumple con los requisitos del gobierno federal por encontrarse lejos de un aeropuerto internacional y de un centro hospitalario.

Por su lado, el gobierno de Nueva Gales del Sur también considera que un centro de cuarentena ayudaría a aliviar la presión sobre el sistema de cuarentena de los hoteles de este estado, que recibe 3.000 personas por semana.



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Published 7 June 2021 9:43am
By SBS SPANISH
Source: SBS Spanish

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