El lunes entró en vigor una de las medidas más drásticas frente al COVID-19 en Australia: la prohibición de reuniones de más de 500 personas si éstas no son necesarias, lo que aumentó el descontento entre los que defienden el cierre de las escuelas y las universidades para evitar mayores contagios de este nuevo y poco conocido coronavirus.
El primer ministro australiano, Scott Morrison, había dicho el domingo que el cierre de las escuelas a gran escala podría tener un impacto negativo en la lucha contra la propagación del COVID-19 en la comunidad.
“Cuando se saca a los niños de las escuelas, la posibilidad de que se relacionen potencialmente con otras personas aumenta ese riesgo (de contagio)”, comentó Morrison al argumentar que además se “puede poner en gran riesgo la disponibilidad de trabajadores críticos como enfermeras y médicos y otros que son esenciales en la comunidad porque tendrían que quedarse en casa y cuidar de sus hijos”.
¿En qué se apoya la decisión del gobierno?
La decisión del gobierno se da en virtud de la recomendación dada por el Comité Principal de Protección de la Salud Australiana, que está integrado por expertos y autoridades de los gobiernos federales, estatales y de los territorios. Esta recomendación indica que las actividades esenciales, como las escuelas, universidades, centros de trabajo y transporte público no deben dejar de operar.
El jefe de la Salud del estado de Victoria, Brett Sutton, dijo en un comunicado que “respalda totalmente” la recomendación de este Comité por considerar que el cierre de las escuelas “no es proporcional o efectiva como una medida de intervención pública para prevenir actualmente la transmisión de la comunidad del COVID-19”.
Al otro lado de la orilla, el experto en estrategias públicas sanitarias y quien ayudó al gobierno australiano en la respuesta contra el Sida, Bill Bowen, remarcó que la gente está furiosa y en pánico por la falta de transparencia y los mensajes mixtos que envía al gobierno.
“Necesitamos honestidad, verdad y transparencia, todo lo que notablemente se ha dado poco”, le espetó Bowtell al ministro de Cuidados de Ancianos, Richard Colbeck, al criticar al gobierno la respuesta tardía a la crisis y defender el cierre de las escuelas anoche en el programa QandA de la ABC.
COVID19 test Source: Pixabay
¿Por qué se propone el cierre de las escuelas y el autoconfinamiento?
Actualmente no hay una vacuna para proteger a las personas del COVID-19. Las autoridades públicas se apoyan en medidas que no son farmacéuticas para contener su propagación como son la higiene personal, el mantener la distancia entre las personas y en sus extremos el autoconfinamiento, las cuarentenas y el cierre de escuelas, universidades, centros del trabajo o de todo un país.
El COVID-19 ha matado a 5 personas e infectado a más de 300 en Australia el nuestro país provienen del extranjero, principalmente de Estados Unidos e Italia, y son personas entre los 30 y 60 años. Todos los fallecidos superan los 70 años.
Nueva Gales del Sur, con más de la mitad de los casos positivos de COVID-19, así como Victoria, se han visto obligados a cerrar algunas de las escuelas y universidades en donde sus estudiantes o personal ha registrado casos de contagio, pero ninguno de los estados ha ordenado el cierre total por 14 días. También algunas escuelas privadas han cerrado sus puertas.
¿Los niños son transmisores asintomáticos o población en riesgo?
La información sobre los niños como potenciales transmisores del COVID-19 es limitada, aunque la misión conjunta de China y el gobierno de la Organización Social de la Salud para estudiar este nuevo coronavirus notó que dentro de los hogares, los niños tienden a ser infectados por los adultos.
El diario The Guardian Australia indicó esta semana que las evaluaciones sanitarias sobre el cierre de las escuelas de epidemias respiratorias previas muestran que los costos sanitarios a menudo se subestiman y los beneficios se sobrestiman.
El pediatra y experto en enfermedades infecciosas, Jonathan Carapetis, dijo al diario The Guardian que el debate del cierre de las escuelas en la comunidad médica se centra en prevenir la transmisión de niño a niño y de ellos a sus familias
“Pero la evidencia de que el cierre de las escuelas tendrá un impacto significativo en la transmisión de la pandemia no es tan seguro”, precisó Carapetis al recordar que los niños no se enferman gravemente y si son infectados los signos es que muestran una versión atenuada o no son visibles del todo.
El también director ejecutivo del Instituto Telethon Kids consideró que los niños aprenden más rápido y se les puede enseñar a lavarse bien las manos y adoptar medidas como la prohibición de reuniones masivas y carnavales o ferias escolares.
¡A cerrar las escuelas ya!
Varios expertos como la expresidente de la Asociación Médica Australiana Kerryn Phelps o el premier de Victoria, Daniel Andrews, hacen llamamientos para que se cierre pronto las escuelas o consideran que es inminente.
Por su lado el ministro de Educación de Australia, Dan Tehan, señala que aún no se ha llegado al punto de ordenar la clausura de las escuelas, aunque admitió que “claramente en estos momentos la idea de contener el virus es cada vez más difícil”.
El presidente de la Asociación Médica Australiana de Australia Occidental, Andrew Milles, cree que el cierre generalizado de las escuelas sucederá en un futuro cercano por lo que instó a estos centros a prepararse.
“En algún momento en las próximas semanas prevemos que el gobierno considerará su cierre”, comentó Miles a la ABC, de cara a lo que podrían ser las próximas vacaciones de Semana Santa.
La experta en bioseguridad de la Universidad de Nueva Gales del Sur (NSW, siglas en inglés), Raina MacIntyre, dijo esta semana al portal de análisis político Crickey que los países que han cerrado sus escuelas en las primeras etapas son los que han tenido más éxito en desacelerar la proopagación del virus.
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MacIntyre precisó que para Australia aún no es tarde y recalcó que el cierre de las escuelas funciona solamente si se hace de forma proactiva y como parte de una medida de cuarentena obligatoria más amplia.
“No puedes postergarlo cuando el sistema de salud está colapsando. Se necesitan medidas proactivas e imponer confinamientos lo más posible”, precisó la experta.
Por su lado el profesor Nick Talley de la Universidad de Newcastle expresó que “la curva es exponencial y necesitamos actuar lo más pronto posible”, al insistir en que si bien no se debe causar pánico, por otro lado “si se espera a ver que la evidencia indica que no se ha aplanado la curva, entonces esto significará que sabremos con mucha rapidez que ya es demasiado tarde”.
“Si tenemos una pandemia, la evidencia sugerirá que la economía colapsará también”, indicó.
Las políticas y directrices actuales
El gobierno federal publicó recientemente el Plan de Respuesta de Emergencia del Sector de la Salud Australiano para el Nuevo Coronavirus (COVID-19), según citaron en un artículo en la revista de análisis The Conversation los académicos Rachel Wilson Rachel Wilson, experta en educación de la Universidad de Sídney, y William Mude, experto en salud pública de la Universidad CQ University Australia.
“Los gobiernos de los estados y los territorios son responsables de los aspectos operativos de las respuestas de salud pública [...] Aplicarán medidas de distanciamiento social de acuerdo con las recomendaciones nacionales y la evaluación de riesgos locales [...] y apoyarán la investigación y el manejo de los brotes en centros de atención residencial para ancianos, escuelas, prisiones y otras instituciones”.
Los académicos enfatizaron que esto revela que “no existe un plan nacional específico para que las escuelas contengan el virus. La declaración parece sugerir que el plan actual consiste en 'apoyar la investigación del brote' en lugar de prevenirlo”, lo que para ellos es una medida reactiva y deja a las
escuelas vulnerables a los brotes sin una estrategia para prevenirlos.
Actualmente se da asesoría general a las escuelas centrada en el retorno de los estudiantes internacionales o los que han regresado recientemente de un país de alto riesgo, y los que han tenido contacto con alguien infectado.
“Sin un plan nacional concreto, las escuelas individuales dependen del asesoramiento de los estados y territorios, que varía significativamente (véase la diferencia entre NSW y NT). Esto puede significar que habrá una respuesta inoportuna e inconsistente para contener el COVID-19 en las escuelas de toda Australia”., alertaron Wilson y Mude
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¿Qué opina nuestra comunidad?
Una encuesta abierta publicada el lunes por la tarde en nuestra página de Facebook, que ya cuenta con más de 1300 votos, pregunta a nuestra comunidad si apoya o no el cierre de las escuelas. Un 84 por ciento apoya el cierre de las escuelas y el 16 por ciento restante que no.
Entre los comentarios están los de Antonella Albini, quien indica que “El gobierno de Australia no ve a los docentes como educadores sino como niñeras. #NoHayRespeto”, y el de Agusta Agustina, que opina que “a mi entender tendríamos que estar absolutamente todos en cuarentena. Perfectamente podes tener el virus y no presentar síntomas y estar contagiando a mucha gente”.
Paloma Viola Borges también cree oportuno el cierre de las escuelas. “si! aparentemente no las han cerrado porque también tienen que cerrar las universidades. Las van a cerrar el 31! porque luego de esa fecha no le tendrán que devolver el dinero a los estudiantes extranjeros! 😡"
Pablo Bardon comenta en Facebook “Pregunta que va conectada , como hizo el gobierno italiano de la gente que paga un crédito por su casa o renta, y por la cuarentena se suspenden pagos así la gente no cae en default, y en Australia como haría?? Sino producir trabajo no hay dinero y no podes pagar y el banco o la real estate no perdonan ni en casos extremos”.
Por su lado, Gustavo Yuletian responde: “Al fin alguien coherente !!! Las autoridades de este país no son de primer mundo son de quinto!! Me pregunto o son sumamente ignorantes o responden a órdenes de grandes corporaciones !! Como es posible que prohíben reuniones asambleas congresos etc. Y andan a diario ómnibus llenos de chiquilines hasta la boca viajando durante 30 o 40 minutos todos apretados y respirándose unos a los otros!!! Siendo los niños potenciales transmisores.??? INSÓLITO!! Y ESO QUE ESPAÑA E ITALIA LES AVISO AL MUNDO QUE NO COMETIERAN LOS MISMOS ERRORES!!! SP”
