De acuerdo con una petición judicial divulgada el martes, la fiscalía pidió que esos 23 periodistas y 13 organizaciones de prensa sean procesadas por ignorar una orden emanada de una corte.
El proceso contra Pell fue realizado lejos de los ojos de la opinión pública mediante una estricta orden del juez Peter Kidd, quien vetó no apenas el reporte sobre el juicio sino también cualquier mención a su propio veto.
Sin embargo, luego de la condena contra Pell en diciembre por abuso sexual contra dos monaguillos en la década de 1990, periódicos como el New York Times y el Washington Post publicaron detalles del proceso, alegando que un juez en un país no puede sentar jurisprudencia a nivel global.
Ante ese cuadro, órganos australianos de prensa se quejaron de que estaban siendo censurados y alertaron a sus lectores en Australia que estaban siendo impedidos de reportar una historia de interés público.
En contrapartida, jueces australianos justificaron la 'mordaza' porque, según apuntaron, los reportes podrían predisponer a los jurados del caso.
Chief Judge Peter Kidd is seen on a TV monitor outside Melbourne County Court on March 13, 2019 in Melbourne, Australia. Source: Getty Images AsiaPac
Entre los periodistas ahora amenazados de cárcel o pesadas multas se incluyen el editor del periódico Daily Telegraph y del Australian Financial Review, así como los editores de los dos periódicos de Melbourne.
También quedaron bajo amenaza el conglomerado Nationwide News, el mayor grupo de periódicos del país y de propiedad de Rupert Murdoch, y el Nine Entertainment, que recientemente adquirió la segunda mayor editora de periódicos, Fairfax Media.
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