Las autoridades australianas cerraron diversas playas en Nueva Gales del Sur y Queensland después de que la erupción de un volcán submarino en la costa de Tonga haya provocado alertas de tsunami y marinas en todo el Pacífico.
El volcán Hunga Tonga-Hunga Ha'apai entró en erupción el sábado por la tarde, y como consecuencia se han observado olas de tsunami.
A las 12:30 AEDT del domingo, seguían vigentes las alertas de tsunami en Nueva Gales del Sur y en las islas Lord Howe y Norfolk. Las alertas anteriores en Tasmania, Victoria y Queensland habían sido canceladas.
Puntos destacados:
- Las autoridades australianas emitieron el domingo alertas de tsunami para algunas zonas de la costa este de Australia tras una explosión volcánica submarina cerca de Tonga.
- Varias playas de NSW y Queenslad fueron cerradas a raíz de la alerta de fuerte oleaje.
- El SES dijo que un pescador tuvo que ser rescatado el domingo por la mañana.
El premier de Nueva Gales del Sur, Dominic Perrottet, dijo el domingo por la mañana que las playas del estado habían sido cerradas y que la gente debía seguir las instrucciones de las autoridades.
"Las playas están cerradas. Por favor, no se bañen", dijo a los periodistas el domingo.
"Estas normas están en vigor para protegerles y mantenerles a salvo. Por favor, sigan esas instrucciones mientras la Oficina de Meteorología proporciona más información al gobierno en el transcurso del día."
El SES dijo que un pescador de roca tuvo que ser rescatado el domingo por la mañana.
Las playas del sureste de Queensland también han cerrado durante el día, a pesar de que la alerta marítima se levantó para el estado a última hora de la mañana del domingo.
"Las condiciones son inusuales e inestables", dijo Surf Life Saving Queensland en Twitter. "Los servicios de SLSQ están pidiendo al público en general que no entren en el agua".
La Oficina Australiana de Metereología (BOM, siglas en inglés) dijo anteriormente que una ola de tsunami de 1,27 metros de altura se observó en la isla de Norfolk a las 9 pm AEDT y una ola de 82 cm se registró en laGold Coast a las 10.54 pm AEDT el sábado. Se registraron olas de hasta 1,10 m de altura en Ned's Beach, en la isla de Lord Howe, hacia las 23:00 AEDT, y se observó una marejada de 50 cm en Derwent Park, en Hobart, hacia las 23:44 AEDT.
En Port Kembla, en Wollongong (Nueva Gales del Sur), se registró una ola de 65 cm a las 2.50 AEDT del domingo.
El ministro de Sanidad, Greg Hunt, dijo el domingo que ningún australiano ha resultado herido tras la erupción.
Hunt dijo que la ministra de Asuntos Exteriores, Marise Payne, y el Departamento de Asuntos Exteriores y Comercio están trabajando con las autoridades de Tonga.
"El Departamento de Asuntos Exteriores y Comercio continuará colaborando con el Gobierno de Tonga y ha ofrecido, a través de la ministra de Asuntos Exteriores, todo el apoyo posible que pueda ser necesario", dijo Hunt a los periodistas en Canberra durante su última actualización de COVID-19 el domingo.
Por el momento se desconocen los heridos en Tonga y las interrupciones en las comunicaciones.
Los países del Pacífico también están en alerta, y la isla japonesa meridional de Chichijima registró una ola de 75 cm a la 1 de la madrugada AEDT del domingo.
La oficina detectó antes una ola de 1,19 m en Nuku'alofa, la capital de Tonga.
La erupción cortó el acceso a Internet en Tonga, dejando a amigos y familiares de todo el mundo el domingo tratando de ponerse en contacto para averiguar si había heridos y la magnitud de los daños.
Tonga recibe Internet a través de un cable submarino desde Suva (Fiyi), que presumiblemente resultó dañado.
Los Servicios Meteorológicos de Tonga declararon el sábado una alerta de tsunami para todo el archipiélago, y los datos del centro de tsunamis del Pacífico detectaron olas de 80 centímetros.
En Tonga, donde viven unos 105.000 habitantes, un vídeo publicado en las redes sociales mostraba grandes olas que llegaban a la costa y se arremolinaban alrededor de las casas, una iglesia y otros edificios.
La primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern, dijo que las imágenes de la erupción eran "enormemente preocupantes" y que las agencias seguían intentando establecer una comunicación completa con el país.
Con AAP.
